Por estas razones, os mencionamos algunos consejos para seguir durante este verano:

1. En esta temporada del año, que pasamos más tiempo fuera de casa, es más común la aparición de caries al acumularse los restos de comida que no lavamos. Por ello, una genial idea sería utilizar chicles sin azúcar, ya que contribuyen a neutralizar el pH.
2. Otra solución para mantener nuestros dientes sanos es comer, entre horas, uvas y manzanas (a mordiscos).
3. Además, si no tienes a mano tu neceser con cepillo y colutorio, debes beber mucha agua y enjuagarte después de cada comida. Reducirás así los restos de comida y equilibrarás el PH de tu boca
4. En estas noches de verano que queremos cenar de forma ligera para irnos cuanto antes a pasear, es una buena opción ingerir un yogur. Este alimento permite neutralizar los ácidos de las bacterias creadas en nuestra boca
5. ¿A quién no le gusta un buen helado de chocolate mientras pasea por la orilla del mar? Sí es cierto que este alimento es irresistible, pero hay que controlar su consumo. Los azúcares de los helados y otras muchas comidas son perjudiciales para nuestra salud dental. Hay que comer de todo, pero siempre con moderación
6. Si este verano optas por hacer un deporte de riesgo: montañismo, rafting, kite surf o windsurf, etc. ten mucho cuidado. La realización de una de estas actividades podría acabar en caída y en la consiguiente pérdida o rotura de algún diente
7. Además, un problema ocasionado en verano es la barodontalgia o las molestias que se producen debido a un cambio de presión atmosférica. Esto puede ocurrir tanto en un avión, como buceando en las profundidades marinas. La única solución ante este cuadro clínico es tener una buena salud dental, ya que las caries o la gingivitis acentúan la aparición de la barodontalgia. Asimismo, si acabas de realizarte un empaste o un implante dental debes consultar a tu dentista qué sería lo mejor para tu dentadura