La palabra miedo significa sensación de angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario.

El dentista ha venido siendo un especialista que crea estrés, un estrés que muchas veces viene dado por experiencias, percepciones o por historias que nos han contado. Por lo tanto, podemos ver que existen algunos casos en que el individuo ha vivido dichas historias en primera persona y otros que las han adquirido mediante miedos a través de otras historias imaginarias vistas en imágenes o películas.

En el dentista se utilizan materiales que pueden llegar a impactar, los sonidos también pueden llegar a ser desagradables. El paciente no conoce cómo trabaja el dentista, y la boca es una zona que nos causa angustia porque no la conocemos y no sabemos qué es lo que van a hacernos, lo que nos crea en una posición de debilidad. Nos vemos en una situación de descontrol y crea una gran incertidumbre a muchísimas personas lo que les provoca esa sensación de miedo.

Para perder el miedo al dentista es importante saber que hoy en día, las clínicas dentales y sus técnicas han cambiado y que el paciente no debe tener miedo al dentista ni a sentir dolor, ya que mediante la información y la explicación de lo que se va a realizar, de cómo se va a realizar, qué materiales se van a utilizar y las sensaciones que va a sentir hace que en todo momento, el paciente esté predispuesto y avisado de lo que viene por delante.

El dentista nunca coge por sorpresa a ningún paciente, siempre lo va a prevenir de todo lo que pueda sentir para que tenga una cierta confianza y el conocimiento suficiente de lo que se va a encontrar.

Es recomendable hacer un control anual o mensual siguiendo las indicaciones que se han dado en el dentista. Haciendo controles, podemos encontrar pequeñas cosas que necesitan pequeños tratamientos en vez de realizar grandes intervenciones donde haya que llevar a cabo algún tratamiento más complejo. Nunca hay que esperar a tener dolor, hay que seguir unos controles e ir teniendo citas para así evitar en la medida de lo posible cualquier tratamiento dental profundo.