¿Qué son los frenillos labiales y linguales?

Los frenillos son unos pliegues de la mucosa que unen dos superficies contiguas. Existe el frenillo del labio superior, el frenillo del labio inferior y el frenillo lingual.

En determinadas situaciones los frenillos pueden estar alterados, causando problemas fonéticos, ortodóncicos, periodontales o protésicos. Estas alteraciones suelen ser debidas a la variación de su forma, tamaño y posición.

Limitaciones del movimiento del labio y la lengua

Cuando existe un frenillo del labio superior más grande y más grueso, la inserción de este suele estar baja, lo que puede provocar que se cree una separación en los dientes de delante, más concretamente en los incisivos, una separación que nos puede producir alteración en el habla ya que el aire se escapa por delante y no permite hacer la función correcta.

¿Cómo afecta el frenillo con la ortodoncia?

Cuando el frenillo es muy bajo nos podemos encontrar limitaciones o alteraciones de movilidad en el labio superior. Cuando la alteración la encontramos en el frenillo del labio inferior se suelen encontrar menos problemas a nivel de ortodoncia, pero si podemos encontrarnos con que esta inserción crea una tensión que lo que hace es bajarnos la posición de la encía en los dientes de delante, produciendo lo que se denomina recesión gingival.

También nos podemos encontrar alterado el frenillo lingual, si tenemos un frenillo lingual muy corto, en este caso también tendremos una lengua con menos movilidad, ya que se sitúa en una posición más baja que provocará que haya alteraciones en sus funciones:

Por lo tanto, en los casos en los que la lengua se encuentra en una posición más baja nos encontramos con maxilares más pequeños, alterando así el desarrollo de los maxilares, causando malposiciones de los dientes y haciendo que haya una mala función a nivel esquelético y dental de la masticación.

¿Qué tratamientos existen para los frenillos linguales?

Frenectomía: Es un procedimiento que se hace a nivel clínico con anestesia local y sin postoperatorio donde lo que se busca, es la eliminación del frenillo o un cambio en la insercción para permitir al frenillo tener más movilidad y que no esté tan anclado. En este caso, se deberán realizar ejercicios y rehabilitación posterior para que no vuelva a anclarse con el anterior.