Al masticar usamos unos músculos que son bilaterales y están insertados entre el cráneo y la mandíbula. Se llaman músculos masticatorios. Pero también, utilizamos unos músculos que fijan el cráneo respecto del resto del cuerpo y están a ambos lados y detrás del cuello y debajo de la mandíbula. El M. Trapecio y el M. Esterno-Cleido-Mastoideo son dos de los mas importantes, estos son músculos posturales.

Al masticar por ambos lados, estamos usando dichos músculos alternativamente aproximadamente el mismo número de veces, por lo que existirá un equilibrio de tensión muscular izquierda/derecha.

La mayoría de las personas mastican únicamente por un lado o por lo menos con mucha mas frecuencia por el lado que dicen que les es mas fácil. Ayuda a ello la dieta semiblanda que se suele hacer, que no ayuda a trabajar el alimento e incluso es común tragar antes de haberla ensalivado bien.

Cuando por algún problema solo masticamos por un lado, este equilibrio desaparece, y la consecuencia es que aparecerán contracturas a medio plazo, muy molestas y que afectan a la postura corporal. Se hipertrofian los músculos masticatorios de aquel lado y también los músculos laterales y posteriores del cuello.

Si se mastica por un lado únicamente, se producirán también trastornos en el crecimiento y la evolución de los dientes (maloclusiones), trastornos de soporte dental (enfermedades periodontales), alteraciones cráneomandibulares (disfunción) y abrasiones o desgastes anómalos en los dientes.

Son varias causas que inducen a masticar por un lado. Algunas son transitorias, debidas a problemas orofaciales puntuales. Se suele masticar por el lado mas fácil. El dolor, la falta de dientes son de las mas comunes, por ello se debe intentar restablecer la integridad y el equilibrio oral. Si faltan dientes o los que hay impiden el movimiento masticatorio utilizaremos el otro lado. Igualmente se puede decir cuando existe dolor, dental o no, en un lado.