Técnicamente, la inflamación gingival recibe el nombre de gingivitis
Se produce como consecuencia de depósitos, a largo plazo, de placa bacteriana. Si la placa no se quita, se convierte en un depósito duro denominado cálculo o comúnmente conocido como “sarro” que queda pegado en el diente. Tanto el “sarro” como la placa bacteriana inflaman la encía.
Mala higiene oral
Algunas enfermedades sistémicas
Embarazo
Diabetes no controlada
Apiñamiento dental (dificultan la higiene)
Uso de ciertos medicamentos
Sangrado gingival
Encías rojizas
Encías sensibles al tacto
Úlceras bucales
Encías de aspecto brillante
¿Qué tratamiento me tendré que realizar?
Será necesaria una limpieza dental profesional por su odontólogo o higienista de confianza ya que ellos disponen de los utensilios necesarios para remover el cálculo dental de forma correcta. Le darán instrucciones de higiene oral para que perfeccione la técnica de cepillado que usa.
¿Cómo puedo prevenir que se me inflamen las encías?
En función de la causa que ha producido esta gingivitis, se le darán unas recomendaciones preventivas para evitar que vuelva a pasar, como por ejemplo:
Llevar a cabo una higiene oral eficiente (cepillado al menos 2 veces al día y uso de hilo dental o cepillos interdentales)
Realizar una higiene profesional anual o cada 6 meses en función del caso
Tratamiento ortodóncico para mejorar apiñamiento dental
Acudir a su médico de cabecera en caso de que la diabetes no este controlada o si es debido a otra enfermedad no diagnosticada
Uso de pastas o colutorios antibacterianos